martes, 25 de junio de 2013

Sobrevivir a una comida familiar/con amigos

Holaa!! 

¿Cómo estáis? Disfrutando de el veranito y de esos rayos de Sol que, como dije, aportan vitamina D? :)

Ayer asistí a una cena familiar, por eso hoy me ha parecido que estaría bien hacer una publicación sobre cómo sobrevivir a una comida familiar o con amigos dentro o fuera de casa.


En el caso de que se trate de que se haga en la casa de algún familiar o amigo, para no preocuparnos mucho sobre nuestra alimentación en estos casos, sólo debemos seguir unos sencillos consejos.

1. En primer lugar, entérate de qué hay preparado para comer/cenar. Si puedes, entra en la cocina para verlo, y si no tienes la suficiente confianza, entra con la excusa de ayudar a preparar los platos y echa un vistazo a todo.

Esto es importante porque, a veces, van sacando los platos poco a poco, y a veces, lo que primero ponen el la mesa suele ser comida de picoteo de bastante "engorde" y sacar, por ejemplo, luego ensaladas. En este caso, sería un error no conocer lo que se servirá, puesto que podríamos llenarnos de patatas fritas, cocas, embutido, pan, etc, y luego no tener suficiente hambre para la ensalada.

No rechacemos todos los platos sin ni siquiera probarlos, puesto que podría parecer de mala educación para los anfitriones.

2. En estos casos, mientras no hayan sacado lo "sano", podemos picar un poco, intentando decantarnos más por los alimentos menos procesados, cuanto más caseros mejor y que pensemos que están cocinados al vapor (como mariscos o verduras), con poco aceite, o simplemente no están cocinados.

Así, al sacar unas ensaladas, por ejemplo, debemos tomarlas como el plato principal para nosotros, y llenarnos con ellas.

3. Otro consejo que os doy es que intentemos seguir las conversaciones, al menos las de nuestro alrededor, para así no comer tan rápido y sentirnos saciados antes, además de fomentar nuestras relaciones sociales.

Y en el caso de que la comida sea en algún restaurante, si también se van a pedir muchas cosas para el medio, propón todo aquello que veas más saludable, como marisco al vapor o ensaladas, por ejemplo.

Y, evidentemente, si te vas a pedir un plato individual, elige carnes blancas o pescados poco grasos y cocinados al vapor, a la plancha o al papillote, evitando las salsas.

4. Y ahora... llegó el momento del tan amado y a la vez temido postre.

En el caso de que estemos en un restaurante podemos pedir sin problema fruta, yogur o incluso panna cotta en poca cantidad, o pasar directamente al café/infusión.

Y si estamos en una reunión familiar o con amigos en alguna casa, intentemos elegir fruta, a toda costa, pero en el caso de que el anfitrión/a haya elaborado él o ella mismo/a el postre, no seamos maleducados, y probémoslo sin temor, pero con un trocito pequeñito nos bastará, eso sí, no nos lo dejemos a medias intentando no comer demasiado, o podrías ofender a alguien.

5. Y por último, podrían ofrecernos café o infusiones. En este caso, tenemos que intentar elegir la infusión, siempre más saludable, y no nos hará falta azúcar (probablemente ya hayamos consumido demasiados excesos a lo largo de la comida, no cometamos uno más).

Espero que os hayan gustado mis consejos,

Pasad muy buen día,


Un besito enorme a todo el mundo :)

Sed felices

No hay comentarios:

Publicar un comentario